22 agosto 2023 | Florence Muindi | 0 comentarios

Aceptar el cambio

2023 es el 40.º aniversario de A Rocha. También es un año de cambios. Como fideicomisario de A Rocha Internacional, formé parte del panel que entrevistó y seleccionó a un nuevo líder. Estamos agradecidos por la guía y el favor de Dios en el nombramiento de Ed Walker. Mientras afrontamos las oportunidades que se nos presentan, las puertas abiertas, las victorias, las alianzas afines, los empujones y los desafíos, ascendemos paso a paso y celebramos cada paso que damos hacia nuestra herencia.

Algunas personas se sienten cómodas con el cambio, otras no tanto. En cualquier caso, somos viajeros en esta vida y el cambio es inevitable. Como creyentes que buscamos un crecimiento continuo en santidad, se nos invita a la transición y al reposicionamiento espiritual, físico, social y mental. Si aceptamos el cambio y estamos atentos a las indicaciones de Dios, podemos prosperar.

1 Reyes 18 cuenta la historia de la resistencia de Elías contra los profetas de Baal y Asera en el monte Carmelo. Obedeciendo al Señor, Elías se presentó ante el rey Acab. La tierra estaba en el tercer año de una terrible sequía y esclavizada por falsos dioses. Como el único que quedaba hablando en nombre del Señor Todopoderoso, Elías dice audazmente a Ajab que convoque a los profetas idólatras para poner fin a la cuestión de a qué dios seguir. Mientras el fuego del Señor consume no sólo el sacrificio, sino también la madera, las piedras, la tierra y el agua, empieza a llover. Elías se mete el manto en el cinturón y echa a correr, tan deprisa que alcanza el carro de Ajab. Amanece una nueva estación para Elías, la nación y el mundo.

Elías, sabiendo que había llegado el momento de poner fin a una sequía tanto en el ámbito físico como en el espiritual, invitó a una postura de obediencia y entrega para fluir con lo que Dios estaba haciendo. Puesto que el Señor no nos oculta sus mandatos, se atreve a cambiar nuestras estaciones -para nuestro bien y para su gloria- sin pedirnos permiso. En la plenitud de los tiempos, vuelve a cambiar, y somos mejores cuando nos alineamos de todo corazón con su voluntad.

Del mismo modo, debemos ser audaces a la hora de cooperar con Dios. Elías, porque está tan seguro de que el Señor se mueve, se enfrenta a Ajab sin vacilar, y al enfrentarse a cientos de profetas de Baal, prepara el escenario para el despliegue del poder de Dios con la plena seguridad de que Dios será Dios. Como Elías, debemos orar e invocar al Señor para que intervenga como Dios manda. Dios no sólo demostrará que es Dios, sino que, además, enviará lluvia.

Que escuchemos sus mandatos -de hecho, que busquemos sus mandatos- para que podamos cumplir, con gracia, todo lo que Él tiene para nosotros, en cada estación, en esta estación, caminando con una sensibilidad intencionadamente cultivada con el Señor, en cada estación que Él permita.

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